una vez leía por ahi - quizá de Bucay - que en la vida aveces nos tocan (elegimos) maestros que lastiman y maestros amorosos... porque el paso de cada persona nos instruye, nos enseña algo...lamentablemente nos pasamos mucho tiempo eligiendo maestros que nos enseñan a "golpes" lo que debemos aprender en el camino...
pero de pronto sucede, -se abren las nubes en el cielo, todo se inunda de luz- y por alguna extraña y bendita razón que desconocemos y que tal vez escapa a nuestra elección consciente (o tal vez es que hemos sanado un poco más) que tenemos la suerte de elegir un maestro amoroso, que te enseña con paciencia y con amor a crecer sola y a tu lado... ahora bien... este maestro amoroso tal vez no sabe que lo es... pero se tropezó contigo en un momento de su vida en que podia hacer mas bien que mal y que tenia la voluntad para hacerlo...
este fin de semana pude vernos a los dos... desde el rincón de las habitaciones de mi infancia mental... cómo con paciencia, con amor, con suavidad y algunas veces con fuerza o alguna reprensión... tomaste mi mano una vez más, y me hiciste transitar por el camino en el que se me van cayendo los miedos, las ausencias, los abandonos, los rechazos... por donde las piedras que encuentro se van suavizando, mis demonios bajando la voz y lentamente soltándome los grilletes... me hiciste sentir las certezas que me hacen falta en medio del caos de locura, incertidumbre y temor que dejaron pintadas las paredes de mi alma 37 años de transito junto a maestros menos buenos...
AK GRACIAS... TE QUIERO
1 comentario:
Todo buen maestro aparece cuando el alumno está listo.
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