cuando el río suena...

hoy tuve otra vez que darme de frente con la pared... comprobar que en el mundo existe poca gente sana mentalmente y que los amigos que crees conocer de pronto les cambia el chip y se convierten en algo peor que el hombre verde...
hoy ha sido muy doloroso comprobar lo que aquella frase dice ... "ninguna buena obra queda sin castigo"... pues asi es, abrí las puertas de mi casa a alguien que creía mi amigo, alguien que el tiempo que conoci fué buena persona conmigo y ahora, terminó siendo un ratero estafador buscado por la justicia...
qué tristeza, porque confié en él tanto para permitirle vivir en mi casa, tanto para prestarle mi auto, tanto como para recomendarlo, para involucrarlo con mi gente... porque le quería, confiaba en èl y me sentía agradecida por lo que había sido en mi vida en algún momento... y de pronto llega, me pide ayuda...
y qué haces?
a mi me enseñaron a ser una persona agradecida y cuando alguien hace cosas buenas por mi, lo agradezco para siempre... y si algún día me lo piden, lo retribuyo con gusto...
quién iba a decir que esta persona que no me quitó nada a mí, con sus acciones ha puesto en duda mi honorabilidad... a mi que tanto me ha costado llegar donde he llegado, que he evitado la deshonestidad porque sé que paga mal, y porque a mí si me educaron bien...
y porque sé que cuesta toda una vida crear una reputación, pero hace falta un minuto para echarla por tierra... y ahora viene un hijo de puta mal agradecido a embarrarme con sus acciones y yo... sin deberla ni temerla...

Está muy cabrón!
Qué tristeza, que enojo, que angustia, que impotencia... qué mezcla de sentimientos que no, NO me merecía!