Me entraron ganas de decirle: "hey, aprovecha, no siempre querrá que lo (a) abraces, el tiempo vuela y cuando veas se fue de tu lado"...
Entiendo el cansancio - muy bien - pero no el hartazgo, sin embargo, qué me importa a mí, cada quien tiene sus batallas que pelear y cada quien tiene sus lecciones que aprender... solo, entonces, me pregunto ¿por qué tener un hijo si no puedes darle toda tu alegría, todo tu amor, toda tu paciencia en cada momento no importado la situación?